Las clases virtuales potenciaron la demanda de maestros particulares en Rosario
La demanda de enseñanza particular se duplicó en Rosario desde marzo de 2020, cuando comenzó la pandemia de Covid-19 que llevó a suspender las clases presenciales en casi todo el país.
Se trata de un mercado que cambió drásticamente desde ese momento. Antes, las clases particulares eran una demanda puntual, para una materia o para rendir un examen y actualmente los padres buscan profesionales de la educación que brinden un apoyo sostenido y un acompañamiento continuo a los alumnos, que tienen clases virtuales.
En Rosario, dependiendo de la materia y de la carga horaria, el valor de la hora va de $300 a $600 y los profesionales de la educación encontraron un nicho de mercado en el cual antes tenían un ingreso extra para hacerlo, en algunos casos, su ingreso principal; fundamentalmente aquellos que se dedicaban a suplencias.
La virtualidad decretada en la mayoría de las regiones del país potenció el negocio de las clases particulares y moviliza una economía que, si bien llega por una situación no deseada, ayuda a un sector de los docentes que no tienen ingresos por esta situación.